viernes, 26 de octubre de 2012

Inquietantes novedades de Kingdom Death

Este mes Adam Poots surte su tenebroso universo de Kingdom Death con miniaturas para todos los gustos, aunque todas ellas con el siniestro toque que sólo él sabe darles.

Por un lado tenemos a uno de los primeros héroes en hacer su aparición en el trasfondo de Kingdom Death durante su desarrollo inicial, el Caballero del Ocaso. Su orden, consagrada a la conservación del saber y la Historia de la humanidad frente al caos que la rodea, es ahora un pálido reflejo de su antiguo poder. Sus guerreros superan ritos de iniciación que alteran su mente y su percepción del mundo que los rodea: así quedan protegidos frente a los horrores antinaturales que cazan, pero también se vuelven fríos, distantes y ajenos a cualquier sentimiento humano. Su precio es de 25 US$ (19,40 euros).

Después llega una monstruosa figura de aspecto aberrante, recién sacada de las pesadillas de algún demente. Se trata de una divinidad obsesiva, el Dios de la Forja, que vigila constantemente los hornos que alimentan las Tierras Sagradas y cuyos poros rezuman el mismísimo acero divino del que están hechos los edificios de sus hombres santos. Madres, Abuelas y Caballeros Blancos son sus creaciones más apreciadas, ya que busca la perfección en todas sus obras. Esta enorme figura, rodeada por tres esclavos humanos sin mente y que sujeta en sus manos un martillo y sus... tripas, cuesta 125 US$ (algo más de 95 euros).

Pero sin duda la más siniestra de todas es la miniatura del Escriba, un personaje envuelto en sombras y misterio pero que es el poder real tras los Reyes y sus ejércitos. Considerado por muchos hombres como un dios reencarnado, se presenta ante ellos como un hermoso joven reclinado en su trono de carne viva que se amolda a su postura, servido por grotescas concubinas deformes y cuya pluma puede hacer realidad cualquier cosa que le plazca escribir en su gran Tomo de las Eras. Lo podéis comprar por 55 US$ (unos 42,50 euros).

twilight knight

forge god

the scribe

No hay comentarios:

Publicar un comentario