Título original: Shturmovye Groups and City Fighting
Autor: Wayne Turner
Enlace original: www.flamesofwar.com
Traducción: Marcos García (Kushtar)
Antes de la batalla de Stalingrado el Ejército Rojo aún no había librado ninguna batalla urbana importante. Las luchas previas en grandes ciudades como Odesa o Sebastopol se habían basado en anillos defensivos y fortificaciones en los campos circundantes al núcleo urbano. La lucha había terminado y los defensores habían sido evacuados mucho antes de que se produjesen combates en las calles de Odesa, y en el caso de Sebastopol los alemanes se limitaron a bombardear la ciudad hasta que se rindió tras haber roto su anillo defensivo.
No fue hasta la batalla por Stalingrado, a finales de 1942, cuando los soviéticos tuvieron que hacer frente a una sangrienta lucha callejera y sus desafíos particulares. Los combates en las calles dieron a los comandantes rusos muchos quebraderos de cabeza a los que plantear una solución.
- Líneas de fuego angostas y limitadas.
- Uso de barricadas y la fortificación de edificios ya existentes.
- Incapacidad de usar grandes masas de infantería y tanques de forma coordinada, lo cual llevó a tener que confiar en la iniciativa de suboficiales y mandos inferiores.
- Complejidad a la hora de coordinar las acciones de blindados y artillería con las de la infantería.
- Dificultad a la hora de mantener contacto y control sobre las unidades involucradas en la lucha.
Para superar estos problemas el Ejército Rojo formó en Stalingrado grupos de asalto especializados (Shturmovye Gruppa), basados en compañías de un batallón de fusileros normal (Strelkovy Batalon) pero equipados con subfusiles, granadas de mano, cócteles Molotov y rifles antitanque. Además contaban con otras armas más pesadas como cañones de infantería, morteros y ametralladoras pesadas. Dada la voluble naturaleza de la guerra urbana, los Shturmovye Gruppa harían uso de estas armas como una fuerza de armas combinadas que podría cubrir sus propias necesidades de apoyo logístico y artillero. En la mayoría de ocasiones también habría disponibles zapadores para limpiar minas o tareas de demolición.
Habitualmente el comandante de una compañía de fusileros sólo tendría autoridad sobre sus propios hombres, pero el comandante de un grupo de asalto tenía también mando sobre sus armas de apoyo, ingenieros de combate y hasta cierto punto incluso de algunos tanques o cañones. Esta cesión de poder a los comandantes inferiores fue obligada, a causa de la naturaleza caótica, voluble e inmediata de los combates urbanos. Los comandantes de los Shturmovye Gruppa no tenía tiempo, ni muchas veces ocasión, de pedir apoyo lejano de la artillería a su superior, ni el comandante de su batallón era consciente la mayoría de las veces dónde estaban todas sus compañías para proporcionarles la ayuda necesaria.
Después de Stalingrado el Ejército Rojo siguió aumentando el arsenal de sus Shturmovye Gruppa con cañones pesados de 122 mm, para marcar las posiciones enemigas en edificios, y también todos los lanzallamas posibles. Tanques y cañones de asalto también empezaron a operar conjuntamente con los grupos de asalto, ofreciendo apoyo artillero inmediato contra la resistencia más obstinada.
En diciembre de 1944 los Shturmovye Gruppa luchaban por la ciudad de Budapest apoyados por tanques T-34, tanques lanzallamas OT-34 y cañones de asalto SU-76M. Además también se incluyeron dos brigadas de Ingenieros-zapadores para el asalto final a la capital húngara, que aportaron un nivel adicional de experiencia y potencia de fuego.
Tácticas de los Grupos de Asalto
Composición
Lo normal es que a un batallón de infantería que luchase en un entorno urbano se dividiese en tres grupos, de acuerdo con sus tres compañías de fusileros. Uno de ellos lideraría el avance como grupo de asalto, el segundo iría justo detrás como grupo de apoyo y consolidación, mientras que el tercero haría las veces de reserva. Cada Grupo de Asalto imitaría esta distribución a su vez en sus grupos internos.
Como ya se ha dicho anteriormente, los Shturmovye Gruppa tenían acceso a una amplia variedad de armas. La fuerza y composición de cada grupo dependía en gran medida del objetivo de su misión. Su comandante podría elegir las armas necesarias que usarían sus hombres antes de entrar en combate, guiándose por las necesidades concretas de cada situación.
Los Shturmovye Gruppa estaban sub-divididos a su vez en tres grupos: un grupo de asalto compuesto por soldados con subfusiles y varios lanzallamas; un grupo de refuerzo con subfusiles, ametralladoras ligeras o pesadas, y zapadores; y un grupo de reserva equipado con subfusiles, uno o dos cañones, ametralladoras pesadas y zapadores.
Las granadas también se convirtieron en un factor importante en cualquier lucha casa por casa. Cada soldado de asalto llevaba cuatro o cinco granadas, en lugar de las dos habituales. También se dio un buen uso a los cócteles Molotov. Cualquier movimiento hacia una habitación, edificio o fortificación estaría precedido del lanzamiento de una granada o cóctel, antes de que los soldados con subfusiles entrasen disparando en todas direcciones.
Los zapadores o ingenieros de combate también fueron clave en el éxito de los Shturmovye Gruppa. Su papel era el de eliminar cualquier obstáculo, ya fuesen barricadas o alambre de espino, así como abrir huecos en muros para facilitar el movimiento de sus compañeros o desactivar minas.
Práctica
Era habitual que cada Grupo de Asalto avanzase limpiando una calle de principio a fin, con otros grupos haciendo lo propio en las paralelas.
Antes de que los Shturmovye Gruppa pudiesen entrar en acción para limpiar un edificio o habitación, debía anularse la capacidad enemiga para realizar fuego de supresión sobre ellos. Ese era el papel de las armas pesadas de los grupos de refuerzo y reserva de estas unidades. La naturaleza de los entornos urbanos dictaba que lo habitual era que los defensores de un edificio contasen con puestos de tiradores situados en varias alturas.
Cualquier entrada o abertura era usada como puesto de tirador o simplemente tapiada. No obstante, antes de que los zapadores pudiesen abrir un hueco para acceder al edificio, la potencia de fuego del enemigo debía ser eliminada o neutralizada. Los cañones y ametralladoras pesadas de los Shturmovye Gruppa se usaban para silenciar los puestos de tirador mediante un fuego preciso y directo contra cada posición. Los cañones más grandes, como los ZIS-3 de 76 mm o los obr 1938 de 122 mm eran lo bastante potentes como para eliminar por completo una posición defensiva, mientras que ametralladoras y morteros se encargaban de que el enemigo tuviese la cabeza agachada lejos de las aberturas. Si había que vérselas con cañones de asalto o tanques enemigos, estas piezas de artillería también serían muy útiles.
Una vez el fuego defensivo del enemigo había quedado reducido al mínimo, era el momento de que los zapadores avanzasen para eliminar barricadas, alambradas o minas con su equipo especializado. También podían abrir un hueco en las paredes si era necesario con sus cargas de demolición.
Cuando los zapadores hubiesen abierto camino, el Grupo de Asalto entraría en el edificio abriéndose paso con granadas y lanzallamas. El grupo de refuerzo actuaría en los alrededores del edificio, si era posible, para cortar las posibles rutas de huida. Los soldados en el interior del edificio irían ascendiendo desde el nivel inferior hasta el superior, eliminando la resistencia piso por piso. Si no quedaban escaleras disponibles, harían uso de escalerillas de mano o los propios agujeros en los suelos y techos.
Una vez limpio, el grupo de refuerzo seguiría al grupo de asalto al interior del edificio para consolidar sus defensas, con especial atención a sótanos, desagües o alcantarillas o conductos donde podría haber enemigos al acecho. También se tomarían medidas frente a cualquier contraataque posible para retomar la posición. Cuando el edificio estuviese verdaderamente asegurado y bajo control, se podía centrar la atención en el siguiente. Desde su nueva posición podrían detectar los puestos de tirador enemigos en los edificios colindantes con mayor facilidad, lo cual ayudaba a planear los asaltos posteriores. Los muertos y heridos eran evacuados con rapidez y se recibían municiones para reabastecer al Shturmovye Gruppa, además de permitir un breve respiro a los soldados.
Si los edificios colindantes estaban poco defendidos o incluso abandonados, el Grupo de Asalto seguiría su avance sin detenerse para tomarlos también, dejando el trabajo de asegurar y controlar sus conquistas al grupo de reserva.
En Flames of War
Las reglas de Lucha en las Calles se pueden encontrar en las páginas 221 a 226 del Reglamento o en las páginas 60 a 65 de Das Book.
Los Shturmovye Gruppa se formaron para lidiar con los problemas intrínsecos de la guerra urbana, por lo que a continuación os ofrecemos unos consejos sobre cómo usar los Shturmovye Batalon del suplemento Stalin’s Europe en una lucha callejera de Flames Of War.
Ablandar al enemigo
Si juegas la misión Ni un Paso Atrás (la misión de lucha urbana de la página 226 del Reglamento) tendrás varios edificios que asaltar. Aquí es donde las opciones de cañones pesados, como el antitanque ZIS-3 de 76 mm y el howitzer obr 1938 de 122 mm, demostrarán su valor. Tienen la capacidad de eliminar a los equipos enemigos en el interior de los edificios, gracias a su Potencia de Fuego tan elevada, aunque cada uno equivale a dos Equipos de Asalto. También son muy útiles para esta tarea los obr 1942 de 45 mm y los obr 1927 de 76 mm, que tienen una Potencia de Fuego decente con la ventaja de que sólo cuestan el equivalente a un Equipo de Asalto cada uno.
Las demás armas, como equipos de ametralladoras, ametralladoras pesadas Maksim, morteros 82-BM-41 o rifles antitanque PTDR, no eliminarán tantos equipos enemigos como los cañones pesados, pero tienen el potencial de suprimirlos (NdT: pin down), lo cual es vital antes de un asalto.
Cada Shturmovye Gruppa tiene suficiente potencia de fuego propia, pero siempre viene bien contar con algún refuerzo por si hace falta equilibrar la balanza. Unidades adicionales como cañones de asalto SU-76M, tanques T-34, tanques lanzallamas OT-34, compañías de Destructores de tanques y artillería divisional pueden ofrecer un volumen extra de potencia de fuego para ayudar a los Shturmovye Gruppa a abrirse paso por las calles.
Abriendo camino
El papel de tus equipos de ingenieros, o de cualquier otro equipo de apoyo de zapadores, es abrir camino para tus Sturmovye Gruppa. Pueden limpiar campos de minas, eliminar barricadas o abrir boquetes en los muros, siempre mientras el enemigo esté suprimido, por supuesto. Intenta eliminar primero los obstáculos donde tu rival no pueda concentrar mucha potencia de fuego, para que tus ingenieros puedan realizar su labor con más calma.
Cualquier equipo de infantería puede traspasar un muro, pero los equipos de ingenieros lo tienen más fácil gracias a que repiten las pruebas de Habilidad falladas. Un muro traspasado crea una nueva abertura permanente sobre el terreno de juego, la cual puede ser un punto de entrada vital para asaltar un edificio. Cuantas más aberturas puedas crear para llevar a tus tropas al interior, más equipos tendrás luchando el primer turno de asalto (sólo puede combatir un equipo en cada abertura durante un Asalto) y habrá menos probabilidades de que un contraataque enemigo te eche del edificio.
Además de preparar los edificios para un asalto posterior, los equipos de ingenieros también pueden limpiar las calles de obstáculos como alambradas, barricadas o minas.
Al asalto
Cuando hayas suprimido al enemigo, eliminado su potencia de fuego y tengas equipos suficientes para realizar un primer turno de Asalto, es el momento de iniciar la última fase de conquista de un edificio.
Como ya se ha dicho anteriormente, debes asegurarte de tener bastantes equipos trabados en combate en el primer turno de un Asalto. Dado que sólo puede luchar un equipo a través de cada abertura del edificio, debes asegurarte la posibilidad de eliminar tantos enemigos como puedas de los que defienden dichas aberturas. Si es posible, lo ideal sería asaltar un edificio o piso que contenga menos equipos enemigos que aberturas, lo cual te garantizaría acceso al interior en los contraataques subsecuentes del Asalto.
Los Shturmovye Gruppa son Intrépidos Entrenados, lo cual significa que impactan con 4+ en Asaltos y que deberías impactar con un 50% de tus equipos, lo que te daría acceso al edificio a través de la mitad de las aberturas asaltadas. Dado que los impactos se pueden distribuir entre cualquier equipo enemigo presente en la habitación, te puedes encontrar con que las aberturas siguen bloqueadas porque tu rival tiene allí concentrados más equipos que aberturas asaltadas. Si este no es el caso, no obstante, podrás empezar a introducir tus equipos en el edificio o habitación en tu siguiente contraataque (siempre que no hayas fallado la prueba de Motivación para hacerlo).
Si has podido introducir equipos en el edificio en los contraataques posteriores al Asalto, dichos equipos, así como cualquier otro que haya en las aberturas de las paredes, podrán luchar. Esto debería aumentar en gran medida tu potencia de fuego y el Shturmovye Gruppa no tardará en eliminar cualquier equipo enemigo que siga resistiendo.
Consolidación
Una vez hayas tomado un edificio o habitación deberías introducir más equipos en previsión de un posible contraataque enemigo. También tendrías que empezar a pensar tu siguiente movimiento y qué pelotones o potencia de fuego te hacen falta para mantener en marcha tus planes.
En edificios con varias habitaciones o pisos tendrás que realizar más Asaltos si aún quedan equipos enemigos en las inmediaciones. Simplemente repite el proceso descrito. No hagas asaltos imprudentes simplemente porque creas que estás en racha; prepara cada movimiento con calma siguiendo un plan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario