Godslayer refuerza sus facciones

Hacía mucho que no hablábamos de Godslayer, el juego de fantasía épica a 32 mm de Megalith Games en el que líderes carismáticos reúnen a sus hombres en el mundo de Calydorn para enfrentarse a las fuerzas demoníacas, las hordas de hombres-bestia e incluso a otros seres humanos corruptos.

Este año empiezan con fuerza y ya llevan publicadas varias cajas de unidades completas, listas para ser desplegadas sobre los sangrientos campos de batalla de Calydorn. Una de las más esperadas era la de los Hijos de la Guerra, la guardia de élite del Templo de Halodyn, que incluye tres figuras, una carta de estadísticas y 12 marcadores especiales por 19,95 euros. Pero también están los Hermanos de la Espada de Skannfyrd, vikingos sin miedo que vienen en una caja de 10 miniaturas (incluido líder) y 12 marcadores por 39,95 euros. La Guardia del Cromlech, el brazo armado de la religión druídica que mora en los bosques del norte, forman un grupo de 5 miniaturas (incluido líder) con sus cartas y marcadores, por un precio de 29,95 euros. Y por último los Destripadores Fomorianos, musculosos hombres bestia sin conciencia ni moral, que engrosarán tus filas con 5 voluminosas miniaturas (incluido líder) y sus correspondientes fichas y marcadores por 39,95 euros.

Llegan las amazonas a Godslayer

Antaño las tribus del continente del este de Asrae estaban formadas por hombres y mujeres, y sus guerreros eran temidos como los más sanguinarios de toda la raza ithya. Esta ferocidad fue su perdición, ya que los dioses se hartaron de sus continuos saqueos indiscriminados de sus ciudades y templos. Por ello maldijeron a las tribus de las actuales amazonas para que no pudiesen concebir nunca más hijo varón, en la creencia de que esto las detendría, pero las curtidas mujeres de las planicies cogieron las armas con igual determinación que sus hombres. Así se creó una férrea cultura matriarcal que se perpetúa mediante las relaciones esporádicas que estas guerreras mantienen con los hombres de las ciudades y pueblos que cruzan en sus rutas comerciales o migratorias.

Estas nómadas montan a lomos de los zempalas, criaturas gráciles y veloces con rayas blancas y negras. Son jinetes asombrosas que en los festivales de sus tribus realizan todo tipo de demostraciones de habilidad y destreza sobre sus monturas. Su táctica favorita es cabalgar en gran número para levantar enormes nubes de polvo del desierto de Karkhos que envuelvan a sus enemigos, los cieguen y desorienten. Luego, guiándose únicamente por su excelente sentido del oído, se introducen en pequeños grupos en la nube de polvo y caen sobre sus víctimas en silencio eliminándolas de una en una.

Esta es la atractiva historia de la nueva facción de Godslayer, las Cazadoras Amazonas que se unen como tropa mercenaria a la facción de las ciudades-estado de Halodyne. Megalith Games aún no ha dado fecha concreta sobre su salida a la venta (que será junto con la nueva unidad de Guardias del Templo, también para la facción de Halodyne), pero ya nos ha dejado unas sugerentes fotos de tres de estas nuevas mujeres guerreras montadas.

Godslayer cumple y nos surte de cajas de inicio

Este verano hablamos de Godslayer, el juego de fantasía mitológica de Megalith Games que empezaba a pegar con fuerza en el mundillo. Entonces anunciaron que en otoño empezarían a sacar a la venta los starter-sets de las facciones, para que los aficionados que se hubiesen descargado el reglamento y quisiesen hacerse una banda por la vía rápida pudiesen hacerlo.

Cada caja está consagrada a una de las facciones (Progenie de la perdición, Halodynes, Mortans, Nordgaard, Trogloditas y el Pueblo salvaje de Annyr) y tiene un precio de entre 19,95 euros y 29,95 euros dependiendo del número y tamaño de las miniaturas. Si nos parecen pocas y necesitamos aún más refuerzos, también estarán disponibles cajas con dos figuras de hoplitas, legionarios, hombres-bestia, enanos o lo que nos convenga por 9,95 euros.

¿Alguien quiere convertirse en asesino de dioses?

En la inglesa Megalith Games lo tienen claro: por supuesto que sí. Y para ello desde junio han acelerado a tope con el ritmo de salida de sus novedades para Godslayer: Rise of Legends, un nuevo juego de escaramuzas mitológicas entre todo tipo de criaturas fantásticas y héroes de la humanidad, ambientado en el mundo imaginario de Calydorn. El reglamento, que se puede descargar en una versión resumida de inicio rápido desde su página web, ofrece una serie de sencillas reglas basadas en puntos de acción y con un enfoque claramente orientado al combate cuerpo a cuerpo.

Viendo las últimas figuras que están saliendo a la venta está claro que estos tíos no están aquí para hacer amigos, así que vale más que escojas un bando: la Progenie de la perdición, Halodynes, Mortans, Nordgaard, Trogloditas y el Pueblo salvaje de Annyr son las facciones disponibles, que van desde violentos hombres-bestia mutantes hasta siniestros druidas que controlan el poder de la Naturaleza, pasando por adustos enanos y guerreros espartanos que han jurado morir en combate.

Entre otoño e invierno de este año tienen planeado poner a la venta starter-sets de todas las facciones, así como una versión física del reglamento en tapa dura y varias expansiones en forma de ayudas de juego. Habrá que estar atentos al rumbo que tome este juego.