Reseña: Nagash, el Invencible

Nagash, el Invencible

Mike Lee
Novela, 255 pág., rústica con solapas

Timun Mas

ISBN 978-84-480-3858-8

19 €

Puntuación: 3/5

Tras ser derrotado en el campo de batalla a manos de los reyes sacerdotes, el poderoso nigromante Nagash se ve obligado a retirarse a las montañas de Nehekhara. Con el tiempo recupera sus fuerzas y encuentra nuevos aliados en los skavens, hombres-rata mutantes que viven bajo tierra. En su nueva guarida del Pico Tullido, el nigromante descubre algo oscuro y poderoso: piedra de disformidad. Esta roca mágica, codiciada por los skavens, podría proporcionarle al malvado Nagash un poder imparable…

Continúa la trilogía de Nagash, englobada dentro de la serie de Tiempo de Leyendas, que nos cuenta la historia de algunos de los más importantes personajes que han caminado en el mundo de Warhammer.

Es un libro considerablemente más delgado que el anterior (y que afortunadamente cuesta menos), y lo es por una razón, y es que no llegan a pasar demasiadas cosas. Si las trilogías suelen seguir la consabida fórmula de introducción, nudo, desenlace, con el meollo de la trama en su tomo central, esta se desmarca ofreciendo un libro claramente puente entre los hechos del primero y los que acontecerán en el tercero.

La nóvela comienza donde termino la primera, justo después de la derrota de Nagash. Sigue un esquema que no varía durante todo el libro, y es que un capítulo está protagonizado por Nagash, en sus intentos de volver a conseguir poder, y otro por Neferata de Lahmia, y su búsqueda de los conocimientos del gran nigromante. Así siguen salteándose hasta el final del libro.

Y realmente poco más se puede contar sin caer en spoilers, pues poco más sucede. No hay batallas, ni grandes conspiraciones ni nada parecido, sino un recorrido por las andanzas de Neferata y de Nagash para dejarlos libros para la tercera novela.

A su favor, hay que decir que es de lectura sencilla y fluida (vamos, que se deja leer), y que a los fans de la "historia warhammera" siempre les interesa saber lo que sucedió en los acontecimientos que sólo tenían una línea en los textos que hablaban de la historia de los grandes personajes.